lunes, 23 de abril de 2012

La mente y sus juegos

Es curioso como funciona nuestra mente, ya puedes estar donde te dé la gana, que ella la mayoría de las veces hará también lo que le dé la gana. 

No me podréis negar que alguna vez os ha pasado eso de "si... si lo sé, pero no me acuerdo" o "aaahhh, lo tengo en la punta de la lengua" o "como? ah sí ya lo sé". Esos momentos en que pasas de saberlo todo a no saber nada y viceversa. Esos momentos en que tu mente esta jugando.

Los peores momentos en que se puede poner a jugar la mente son los que me han hecho recordar esta interesante teoría, y es que cuando más quieres acordarte de algo, ella más juega. Seguro que también habrás escuchado que durante el día no puedes atender en clase, pero cuando estas por la noche en tu cama, no paras de dar vueltas y vueltas a millones de temas sin sentido.

Es por eso que la teoría dice que cuando tu quieres más ella te dará menos, y cuando tu quieres menos ella te dará más. Y por tanto en ambos casos acabaras maldiciendo tu cabeza. Para los más escépticos os dejo la confirmación matemática de que esto es cierto: (-)*(+)=(-) || (+)*(-)=(-)

Pero, no sé si alguna vez habéis probado a desatar todo vuestro potencial creativo que albergáis en la mente, como cuando antes de dormiros empezáis a crear vuestro mundo de fantasías, donde has aprobado todas las asignaturas, o eres un superhéroe, o vives en un mundo de gominolas o donde los profesores de matemáticas solo hacen que poner como deberes jugar a la playstation. Pues es en esos momentos donde vuestra mente juega con vosotros (+)*(+)=(+).

Y sin irnos más lejos la última de las teorías también es fácil confirmarla: (-)*(-)=(+). El mejor caso para demostrar ésta, lo descubrí la semana pasada en clase, cuándo mi mente pedía a gritos cerrarse y esconderse y yo hacía rato que le había concedido ese placer, el resultado fue, como se demuestra en la ecuación, positivo.